Situación del agua en México, la lluvia una solución
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La escasez de agua en las temporadas secas y el exceso en la época de lluvia, se están convirtiendo en un reto para México. Ante esta situación contradictoria, el uso sustentable y el aprovechamiento del recurso pluvial, se plantean como una solución. Esta circunstancia se hace cada vez más necesaria ante dos fenómenos que se están convirtiendo en un desafío para la sociedad: el cambio climático y el desarrollo urbano. El cambio climático está llevando a que el ciclo hidrológico presente variaciones más pronunciadas y se haga cada vez menos predecible. Esta situación está provocando sequías más agudas y prolongadas, y lluvias más intensas e incontrolables que causan inundaciones. Las evaluaciones del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (PICC) indican que México puede experimentar una disminución significativa en el escurrimiento, del orden del 10 al 20% a nivel nacional, de 76-152 mm anuales aproximadamente. En cuanto al desarrollo urbano, el aumento de áreas construidas y la desforestación, están rompiendo con el ciclo hídrico. Cuando empiezan las temporadas de lluvia, el agua que antes era absorbida por la tierra y seguía el proceso de evapotranspiración de forma natural, por medio de la vegetación, ahora pasa a mayor velocidad sobre superficies impermeables (techos, asfalto, suelos) acumulándose en donde no se espera, saturando los drenajes y provocando inundaciones. A partir de mediados del siglo XX, México pasó de ser un país rural a uno urbano, tendencia que se ha ido en aumento en los últimos años. Además la población en las últimas cinco décadas se cuadriplicó, pasando de 25.8 millones de habitantes en 1950 a 97.4 millones en el 2000, sobrepasando los 104 millones en la actualidad. En
1990 había 37 zonas metropolitas que contenían, 31.5 millones de personas, el 38.8% de la población total de
México; en tan solo 15 años se ha pasado a 561 zonas metropolitanas donde se concentraban 57.9 millones de habitantes, es decir el 56% de la población total de México2. Este aumento de población en las zonas urbanas está generando una fuerte presión sobre los recursos y sobre el medio ambiente, ya que ha incrementado la demanda en los servicios básicos, sobre todo de los recursos hídricos. Según datos de SEDESOL, 69 de las 121 ciudades más grandes del país enfrentan problemas críticos de disponibilidad de agua;
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De éstas, nueve zonas metropolitanas tienen más de un millón de habitantes: Valle de México, Guadalajara, Monterrey, Puebla-Tlaxcala, Toluca, Tijuana, León, Juárez y La Laguna, donde residen 36.6 millones de personas, más de la tercera parte del total nacional (35.4%); en seguida se encuentran 18 zonas metropolitanas con poblaciones entre 500 mil y un millón de habitantes, cuya población en conjunto asciende a 13.5 millones (13.0% del total). 2 Fuente: Delimitación de las zonas metropolitanas de México 2005 y esta tendencia sigue en aumento. Secretaría de Desarrollo Social, Consejo Nacional de Población, Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática. Noviembre de 2007
la disponibilidad más baja se encuentra en ciudades como: México D.F, Guadalajara, Monterrey, Querétaro, Tijuana, León y Toluca (entre otras). Situación paradójica sobre todo si se tiene en cuenta que anualmente México recibe del orden de 1,489 miles de millones de metros cúbicos de agua en forma de precipitación, en promedio 760 mm al año. Sin embargo el 67.3% de la precipitación normal cae entre los meses de junio y septiembre. De esta agua de lluvia, se estima que el 73.2% se evapotranspira y regresa a la atmósfera, el 22.1% escurre por los ríos o arroyos y el 4.7% restante se infiltra al subsuelo y recarga los acuíferos3. Lo cual demuestra que un elevado porcentaje del recurso pluvial se pierde, una enorme oportunidad que se está dejando correr. Solo por nombrar el ejemplo más paradójico, en el Distrito Federal llueve un promedio anual de 700 mm, 115mm más que Londres 4 y 61mm más que Frankfut5; que podrían ser utilizados para el consumo de la población y la recargar de los acuíferos.
En México, las aguas superficiales que escurren por ríos y arroyos o que se almacenan en lagos, lagunas y
humedales representan el 82% del agua renovable total del país; el resto del agua se encuentra en formaciones subterráneas. Aproximadamente 37% (29.5 miles de millones de m³/año) del volumen total concesionado para usos de consumo es de origen subterráneo. Según datos de la CONAGUA, de los 653 acuíferos registrados, 101 son sobreexplotados y de estos se extrae el 58% del agua subterránea para todos los usos. Para el abastecimiento urbano, el tipo de fuente de agua predominante es la subterránea con el 62% del volumen y en Ciudades como el Distrito Federal esta proporción aumenta al 73%6. Con este nivel de explotación es más que evidente la necesidad de recargar las reservar subterráneas utilizando el agua de lluvia. Razón que se hace más evidente en la zona metropolitana del Valle de México, en donde viven 19.331.365 personas, casi el 20% de la población total del país y que tiene una presión hídrica del 132.3%7 ya que se consume más agua de la que se puede recargar. Según datos de CONAGUA, 59.6 m³ por segundo se extraen de los acuíferos del Valle de México pero solo es posible recargar 31,6 m³ con el agua de lluvia que se aprovecha y el agua que se potabiliza y
Estadísticas del agua en México 2010. Documento CONAGUA Revista National Geographic en Español. “Agua dulce”, Barbara Kingsolver. Abril de 2010 5 Fuente: las cuencas Hidrológicas de México. Diagnóstico y priorización. Instituto Nacional de Ecología de México 2010. 6 Estadísticas del agua en México 2010. Documento CONAGUA 7 Fuente: FAO. Information System on Water and Agriculture, Aquastat. Consultado en http://www.fao.org/AG/AGL/aglw/aquastat/main/index.stml. (15/07/2009)
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se trata8. Pero por otro lado recibe 863 mm de agua de lluvia al año. ¿Por qué no aprovechar el agua de lluvia? Este recurso se podría aprovechar para recargar los acuíferos que están siendo sobre explotados y también para algunos usos urbanos. Potencialmente 55% del uso doméstico puede ser cubierto mediante la captura de agua
pluvial, ahorrando al servicio público aproximadamente 110 litros por habitante.
Por estas razones en Soluciones Hidropluviales consideramos que la utilización del escurrimiento pluvial es una necesidad actual y una apuesta a futuro. Para afrontar estos retos, ofrecemos tecnología y sistemas especializados para el manejo integral y sustentable del agua de lluvia desde su captación, limpieza, y control de descargas. Permitiendo su aprovechamiento para usos como: aseo, sanitarios, recarga de acuíferos, riego, etc. Representamos y distribuimos equipos de alto desempeño, simple instalación y mantenimiento. Nuestros
sistemas cuentan con un diseño de vanguardia que utiliza la fuerza del agua para su funcionamiento. No requieren electricidad ni contienen partes móviles. Contamos con equipos desarrollados para amortiguar y minimizar los daños ocasionados por inundaciones. Nuestra experiencia y soporte tecnológico le permitirá optimizar costos y resultados en su proyecto de drenaje pluvial. En Soluciones Hidropluviales …. Hacemos de la lluvia un recurso sustentable
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Revista National Geographic en Español. “Agua dulce”, Barbara Kingsolver. Abril de 2010
La escasez de agua en las temporadas secas y el exceso en la época de lluvia, se están convirtiendo en un reto para México. Ante esta situación contradictoria, el uso sustentable y el aprovechamiento del recurso pluvial, se plantean como una solución. Esta circunstancia se hace cada vez más necesaria ante dos fenómenos que se están convirtiendo en un desafío para la sociedad: el cambio climático y el desarrollo urbano. El cambio climático está llevando a que el ciclo hidrológico presente variaciones más pronunciadas y se haga cada vez menos predecible. Esta situación está provocando sequías más agudas y prolongadas, y lluvias más intensas e incontrolables que causan inundaciones. Las evaluaciones del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (PICC) indican que México puede experimentar una disminución significativa en el escurrimiento, del orden del 10 al 20% a nivel nacional, de 76-152 mm anuales aproximadamente. En cuanto al desarrollo urbano, el aumento de áreas construidas y la desforestación, están rompiendo con el ciclo hídrico. Cuando empiezan las temporadas de lluvia, el agua que antes era absorbida por la tierra y seguía el proceso de evapotranspiración de forma natural, por medio de la vegetación, ahora pasa a mayor velocidad sobre superficies impermeables (techos, asfalto, suelos) acumulándose en donde no se espera, saturando los drenajes y provocando inundaciones. A partir de mediados del siglo XX, México pasó de ser un país rural a uno urbano, tendencia que se ha ido en aumento en los últimos años. Además la población en las últimas cinco décadas se cuadriplicó, pasando de 25.8 millones de habitantes en 1950 a 97.4 millones en el 2000, sobrepasando los 104 millones en la actualidad. En
1990 había 37 zonas metropolitas que contenían, 31.5 millones de personas, el 38.8% de la población total de
México; en tan solo 15 años se ha pasado a 561 zonas metropolitanas donde se concentraban 57.9 millones de habitantes, es decir el 56% de la población total de México2. Este aumento de población en las zonas urbanas está generando una fuerte presión sobre los recursos y sobre el medio ambiente, ya que ha incrementado la demanda en los servicios básicos, sobre todo de los recursos hídricos. Según datos de SEDESOL, 69 de las 121 ciudades más grandes del país enfrentan problemas críticos de disponibilidad de agua;
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De éstas, nueve zonas metropolitanas tienen más de un millón de habitantes: Valle de México, Guadalajara, Monterrey, Puebla-Tlaxcala, Toluca, Tijuana, León, Juárez y La Laguna, donde residen 36.6 millones de personas, más de la tercera parte del total nacional (35.4%); en seguida se encuentran 18 zonas metropolitanas con poblaciones entre 500 mil y un millón de habitantes, cuya población en conjunto asciende a 13.5 millones (13.0% del total). 2 Fuente: Delimitación de las zonas metropolitanas de México 2005 y esta tendencia sigue en aumento. Secretaría de Desarrollo Social, Consejo Nacional de Población, Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática. Noviembre de 2007
la disponibilidad más baja se encuentra en ciudades como: México D.F, Guadalajara, Monterrey, Querétaro, Tijuana, León y Toluca (entre otras). Situación paradójica sobre todo si se tiene en cuenta que anualmente México recibe del orden de 1,489 miles de millones de metros cúbicos de agua en forma de precipitación, en promedio 760 mm al año. Sin embargo el 67.3% de la precipitación normal cae entre los meses de junio y septiembre. De esta agua de lluvia, se estima que el 73.2% se evapotranspira y regresa a la atmósfera, el 22.1% escurre por los ríos o arroyos y el 4.7% restante se infiltra al subsuelo y recarga los acuíferos3. Lo cual demuestra que un elevado porcentaje del recurso pluvial se pierde, una enorme oportunidad que se está dejando correr. Solo por nombrar el ejemplo más paradójico, en el Distrito Federal llueve un promedio anual de 700 mm, 115mm más que Londres 4 y 61mm más que Frankfut5; que podrían ser utilizados para el consumo de la población y la recargar de los acuíferos.
En México, las aguas superficiales que escurren por ríos y arroyos o que se almacenan en lagos, lagunas y
humedales representan el 82% del agua renovable total del país; el resto del agua se encuentra en formaciones subterráneas. Aproximadamente 37% (29.5 miles de millones de m³/año) del volumen total concesionado para usos de consumo es de origen subterráneo. Según datos de la CONAGUA, de los 653 acuíferos registrados, 101 son sobreexplotados y de estos se extrae el 58% del agua subterránea para todos los usos. Para el abastecimiento urbano, el tipo de fuente de agua predominante es la subterránea con el 62% del volumen y en Ciudades como el Distrito Federal esta proporción aumenta al 73%6. Con este nivel de explotación es más que evidente la necesidad de recargar las reservar subterráneas utilizando el agua de lluvia. Razón que se hace más evidente en la zona metropolitana del Valle de México, en donde viven 19.331.365 personas, casi el 20% de la población total del país y que tiene una presión hídrica del 132.3%7 ya que se consume más agua de la que se puede recargar. Según datos de CONAGUA, 59.6 m³ por segundo se extraen de los acuíferos del Valle de México pero solo es posible recargar 31,6 m³ con el agua de lluvia que se aprovecha y el agua que se potabiliza y
Estadísticas del agua en México 2010. Documento CONAGUA Revista National Geographic en Español. “Agua dulce”, Barbara Kingsolver. Abril de 2010 5 Fuente: las cuencas Hidrológicas de México. Diagnóstico y priorización. Instituto Nacional de Ecología de México 2010. 6 Estadísticas del agua en México 2010. Documento CONAGUA 7 Fuente: FAO. Information System on Water and Agriculture, Aquastat. Consultado en http://www.fao.org/AG/AGL/aglw/aquastat/main/index.stml. (15/07/2009)
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se trata8. Pero por otro lado recibe 863 mm de agua de lluvia al año. ¿Por qué no aprovechar el agua de lluvia? Este recurso se podría aprovechar para recargar los acuíferos que están siendo sobre explotados y también para algunos usos urbanos. Potencialmente 55% del uso doméstico puede ser cubierto mediante la captura de agua
pluvial, ahorrando al servicio público aproximadamente 110 litros por habitante.
Por estas razones en Soluciones Hidropluviales consideramos que la utilización del escurrimiento pluvial es una necesidad actual y una apuesta a futuro. Para afrontar estos retos, ofrecemos tecnología y sistemas especializados para el manejo integral y sustentable del agua de lluvia desde su captación, limpieza, y control de descargas. Permitiendo su aprovechamiento para usos como: aseo, sanitarios, recarga de acuíferos, riego, etc. Representamos y distribuimos equipos de alto desempeño, simple instalación y mantenimiento. Nuestros
sistemas cuentan con un diseño de vanguardia que utiliza la fuerza del agua para su funcionamiento. No requieren electricidad ni contienen partes móviles. Contamos con equipos desarrollados para amortiguar y minimizar los daños ocasionados por inundaciones. Nuestra experiencia y soporte tecnológico le permitirá optimizar costos y resultados en su proyecto de drenaje pluvial. En Soluciones Hidropluviales …. Hacemos de la lluvia un recurso sustentable
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Revista National Geographic en Español. “Agua dulce”, Barbara Kingsolver. Abril de 2010
Datos
En este artículo presentamos datos que demuestran la problemática del agua en México, cómo un desarrollo urbano incontrolable, junto con los efectos del cambio climático, están afectando el ciclo hidrológico y entre muchas otras cosas las reservas de agua. El agua de lluvia ha sido vista de forma equivocada como un problema cuando es una de nuestras principales soluciones, para tener líquido, recargar las reservas, evitar problemas sociales como las inundaciones y ambientales como la contaminciación de las fuentes de agua superficiales y subterráneas. La correcta gestión del agua de lluvia es nuestras solución.